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Aseo personal y cómo quitar el olor del sudor en las axilas sin dañar tu salud

 

«Si no lo veo, no lo creo»

¿Cuántas veces has pensado que esa frase no iba contigo y sin embargo en la realidad te sorprende que funciones así? A mí me pasa con ciertas cosas. No dejo de oír y leer que hay que cuidar lo que se come y los productos que usamos porque a la larga, la exposición a tantos tóxicos pueden suponer el desarrollo de enfermedades. Enfermedades que incluso a día de hoy se desconocen. A decir verdad, en ciertos temas he sido un tanto escéptica, hasta que lo viví en primera persona.

Por qué decidí pasar de los desodorantes químicos y buscar un buen desodorante natural.

 

Hace cosa de tres años, empecé a tener molestias alrededor de mi pecho y zona axilar. Al principio no era una molestia constante si no más bien punzante, como si se tratasen de calambres muy fuertes y puntuales. El momento del día que más lo notaba era al anochecer, cuando me ponía el pijama.

A medida que pasaban los meses, el dolor iba incrementando y se tradujo en un dolor prácticamente constante, que me impedía incluso realizar movimientos habituales como estirar los brazos o coger a la niña de mi mejor amiga en brazos.

Visité en varias ocasiones al especialista, porque con toda la información que se tiene hoy en día, pronto era tarde para descartar cualquier teoría que mi mente iba construyendo. Los resultados eran buenos: no había nada raro de qué preocuparse. Un alivio, pero mi dolor seguía y nadie sabía decirme de dónde venía.

 

Búsqueda de información, cada vez más cerca del desodorante natural

 

Soy una persona que no se queda de brazos cruzados por lo que empecé a investigar. Internet, amigos del sector sanitario, información sobre el impacto de productos naturales o biológicos en enfermedades. Vamos, que casi sentí que estaba preparando la tesis de final de carrera.

 

Desodorantes y aerosoles, la «mejor» solución para la sudoración y su relación con síntomas de enfermedades.

 

 

 

¿Tienes problemas de sudoración? Anti-transpirante.

¿Te huelen los sobacos? Desodorante aerosol.

¿Quieres oler bien y ligar? Spray difusor.

¿Tienes un vestido o camisa negra y te vas de fiesta? Desodorante transparente.

 

El mercado ha inventado una solución rápida y variada para cada uno de los problemas en cuanto a higiene personal y olor corporal que se nos pueda presentar en nuestra vida.

Pero ¿ y si en vez de solucionar un problema, te causan más?

Muchos estudios para poder sacar una conclusión sobre los químicos en los desodorantes

 

Que no cunda el pánico. Hay una barbaridad de estudios realizados por distintas Universidades que no han podido demostrar la relación entre los desodorantes y las enfermedades como el cáncer de mama o ganglionar. Pero eso no quiere decir que no sean dañinos a largo plazo y que puedan desarrollar síntomas que nos lo indiquen.

El impacto hormonal que pueden causar en nuestro cuerpo, tratándose de productos que nos aplicamos sobre la piel entre 1 y 3 veces al día, es inevitable.

 

Desodorantes sin causar desequilibrio hormonal. Apto para embarazadas.

Anti-transpirantes, desodorantes en aerosol o desodorantes roll-on. Además del impacto que cada tipo pueda tener en nuestro planeta, como los aerosoles, me centraré en hablar sobre la mayor preocupación en éste campo: los ingredientes o INCI (Nomenclatura Internacional de Ingredientes en Cosméticos).

 

 

Hay muchos que a pesar de estar reconocidos como perjudiciales, siguen presentes en la mayoría de los productos que encontramos en el mercado

En muchos casos, la cantidad de químicos es mínima y por eso cumplen la normativa.

 

Aluminio, parabenos, formaldehido, ftalato o triclosán, son algunos de los ingredientes que hay que evitar incluso cantidades mínimas.

 

 

Primeros pasos de mi análisis. Desodorantes y sus químicos nocivos ¿mito o realidad?

 

Analicé uno por uno, los desodorantes que compraba habitualmente para poder aclararme si sus componentes realmente podían ser los causantes de que me doliese la zona de las axilas y el pecho y busqué alternativas que no contasen con químicos y fuesen lo más naturales posibles.

Los resultados de mi análisis me asustaron y me hicieron ser consciente y ver sobre el papel, la cantidad de productos químicos que día a día me aplicaba sobre la piel, y en una zona tan sensible como las axilas y tan cerca del pecho. Podéis ver la tabla que hice en éste otro artículo: » ¿Conoces a tu desodorante? ¿Sabes qué compras para tu aseo personal?

 

Desodorantes naturales sin químicos. Resultados que experimenté.

 

Hecha la tabla, el impacto en mi mente fue inmediato. ¿Qué podía perder? ¡Nada! Tiré, y lo digo literal. Tiré a la basura todos los desodorantes que me quedaban a medias en casa. Ese mismo día salí a buscar los que más me habían convencido como alternativa.

 

Tardé algo más de dos semanas en ver los cambios, pero fue inmediato como quien dice. Ponerme el bikini o el sujetador ya no eran un problema. Poder hacer movimientos sin que me diesen calambres punzantes que casi, y no exagero, en ocasiones me dejaban sin respiración, fue una maravilla. Volver a recuperarme de algo que al parecer y desde el principio no parecía estar mal.

 

Y dicho sea de paso, me dan el mismo resultado que cualquier otro desodorante que puedas ver anunciado en televisión.

 

Ni olores. Ni sudoración excesiva. Ni cambios hormonales.

Desodorantes  conocidos del mercado, adiós muy buenas.

 

Empecé por enumerar el número de ingredientes de cada desodorante que tenía en casa o había comprado. En algunos casos, fui directamente al supermercado y saqué una foto de aquellos que anteriormente en más ocasiones había comprado. Una vez obtenido el listado, me adentré en investigar el origen de cada uno de ellos y el grado de riesgo que podía suponer para mi organismo.

No hay que olvidar, que éste tipo de productos, se nos vende con la intención de utilizarlo quien menos una vez al día, y que entra en contacto directo con nuestra piel. Día tras día.

Los mejores desodorantes naturales que he probado, sin tóxicos, sin cambios hormonales.

Desodorante natural para embarazadas y niños

Económico: Un bote de desodorante cuesta entre 2 y 5 euros y dura un mes como mucho. Cualquier bote de estos que os propongo, sobre todo la piedra de aluminio, os durará, fácil, 1-2 años !!

Estas son las alternativas que ahora ocupan lugar en mi baño y que toda la familia utiliza. Quiero pensar que gracias al uso de este tipo de productos, el dolor que sufría ha desaparecido. ¿Casualidad? No lo creo. Yo no vuelvo a los desodorantes tradicionales ni de broma:

 

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Última actualización el 2024-10-22 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados