⏰ 4 min.

El cepillo de dientes de mi perro. La importancia de su higiene bucal.

¿En qué me fijo? ¿Con cuál me quedo?

Dedicar tiempo en elegir el cepillo de dientes de mi perro, me facilitó la vida y mejoró la salud de su boca y dientes. Si además del cepillo, quieres vivir más tranquil@ puedes informarte sobre snacks dentales en mi post: << Cómo elegir el mejor snack dental para perros y dormir tranquil@ sabiendo que su boca está sana.

Dicen por ahí, que un perro cuenta con una dentadura y boca más limpias que la de los humanos. A pesar de eso, la mala higiene puede ser la causa de que desarrollen problemas como la gingivitis, enfermedad periodontal o la acumulación de sarro ( Los perros no tienen caries como nosotros ).

¿Cómo consigo que los dientes y boca de Twix estén fuertes y sanos? La importancia del cepillo de dientes del perro

Algunas de las personas con las que saco a mi Staffy a pasear, le dan sólo stick dental a su mascota o algún juguete para que mastique y creen que con eso, es suficiente. Es cierto que hacer que los perros segreguen mucha saliva, pueden deshacer la acumulación que hay en sus dientes, pero ¿te imaginas que en vez de limpiarte los dientes, sólo masticases chicle y luego usases enjuague bucal? Hay que echar mano del cepillo y pasta de dientes.

¿ Cuántas veces le limpio los dientes ?

Lo ideal sería al menos 3 veces por semana, pero mejor hacerlo las veces que puedas antes que… ¡ninguna!

Además del cepillado, siempre puedes completar el ritual suministrándole a tu gordi un stick dental diario.

Aquí te dejo los pasos necesarios para saber elegir el mejor snack dental.

Cómo elegí el cepillo de dientes de mi perro para limpiar sus dientes.

Lo primero que tuve que hacer cuando me decidí a cepillarle los dientes a Twix fue elegir qué tipo de cepillo me iba a resultar más fácil para crear un hábito de limpieza. Principalmente hay dos modelos: de dedal y de mango.

Tipo Dedal:

Capuchón de silicona o microfibra. Los hay de color y transparentes. Se coloca en el dedo a modo funda. Las versiones de microfibra son más sensibles pero también más sucias para nosotros, ya que traspasa el agua.

✓ Flexible

✓ Cachorros

✓ Razas pequeñas, medianas y grandes

✓ Perros nerviosos e inquietos

✓ Fácil uso si el perro NO está acostumbrado.

✓ Encías, dientes y lengua, limpieza asegurada.

⚠ Mayor dificultad para acceder a paredes dentales

⚠ De silicona en su gran mayoría

⚠ Algo más sucio para el dueño porque hay que introducir la mano en la boca de tu perro

Tipo Mango:

Muy parecido al que usamos nosotros para nuestra higiene dental. Consta de mango con cabezal. El número de cabezales puede variar pudiendo ser simples, o múltiples. Los hay de bambú, sin duda alguna la mejor versión para cuidar nuestro planeta.

✓ Acceso a paredes dentales y muelas traseras.

✓ Más limpio para el dueño.

✓ Razas medianas y grandes.

✓ Los hay de diferente número de cabezal para mejor acceso y limpieza más completa.

✓ Recomendables si tu gordo ya está acostumbrado a la limpieza de boca.

✓ Versión bambú eco-friendly

⚠ Más incómodos y duros en encías y lengua.

⚠ Pueden dificultar la limpieza en razas pequeñas.

⚠ No recomendable para cachorros.

Mi experiencia limpiando los dientes caninos

A ningún perro le gusta que le hurguen en la boca y Twix no iba a ser menos. Al tratarse de un cachorro, como cualquier otro truco o disciplina, fue una etapa de mucha paciencia y constancia.

» ¿La clave? Perseverancia y mucha tranquilidad. «

Primera fase: Adaptación.

Mi staffy a penas tenía 5 meses cuando empecé con la fase de adaptación. Ya tenía todas las vacunas puestas y salía a la calle. Vamos, que empezaba a rastrear y a comer todo lo que veía por su camino. Decidí empezar con un cepillo tipo dedal de microfíbra.

Había leído que por su composición, se podían sentir los dientes del perro y que resultaba más fácil hacer que el perro se acostumbrase. Me pareció la manera acertada de empezar.

Efectivamente, me resultó muy cómodo.

Podía controlar la fuerza con la que le limpiaba los dientes y con la que le abría la boca. El perrito no sentía que fuese algo raro y entre juego y juego, se adaptó relativamente rápido. Aunque alguna que otra vez, me llevé un pequeño mordisco entre juego y limpieza.

Pasé así algo más de un año.

Segunda fase: La limpieza como hábito.

A medida que mi Staffordshire iba creciendo, la microfibra no me resultaba muy higiénica, se me llenaba la mano y dedos de babas y pasta de dientes. Así que quise probar algo nuevo.

Cambié a un cepillo dedal de silicona.

Resultaba más cómodo que el de microfibra porque no traspasaba el agua ni la pasta de dientes. Y además, al terminar con Twix, limpiar un capuchón de silicona resultaba más rápido y sencillo con respecto a la microfibra.

A pesar de todo, seguía teniendo que meter mi dedo en la boca de mi perro y no podía evitar terminar llena de babas o pasta de dientes.

Tercera fase: Mi perro ya es adulto.

Twix había cumplido 2 años y hablando del tema con una amiga que también tenía un perro adulto, me recomendó cambiar al cepillo de mango.

Elegí el de tres cabezales. Me había informado y éste tipo alcanzaba la dentadura al completo.

El problema de mi mano cubierta de babas, agua y pasta de dientes se había solucionado. Pero mentiría si digo que no me costó un tiempo volver a acostumbrarle al nuevo cepillo. Además, hacer que Twix me dejase limpiarle las encías y la lengua no resultó tan sencillo como con las anteriores opciones y tanto cabezal no ayudaba en la tarea.

Mi decisión final: Elegir el mejor cepillo de dientes para mi perro.

Cepillo cabezal sencillo de Bambú

Como he dicho, Twix tardó en acostumbrarse al cepillo tipo mango tras varios años con los de tipo dedal, pero cuando por fín se acostumbró, el cambio fue para bien. Para muy bien.

Paciencia fue la clave para que lo relacionase con la higiene y dejase de jugar. Hubo dos motivos principales que me hicieron decantarme por ésta solución.

1. 1. 1. 1. Mis manos MENOS SUCIAS y MÁS HIGIÉNICO.
        FUERA PLÁSTICOS y siliconas, de BAMBÚ.
        TOTAL ALCANCE: dientes, encías y lengua por igual.